Descubra la mejor manera de mantener bajo control la humedad de las piscinas cubiertas

La evaporación es inevitable en cualquier entorno y, en piscinas más grandes, equivale a la pérdida de miles de litros de agua en un solo día. Para evitar costosas reparaciones, daños continuos y riesgos para la salud del personal y los visitantes, tanto la ventilación como la deshumidificación son esenciales.

En este artículo, descubrirá por qué el control de la humedad debería ser la principal prioridad de todos los operadores de piscinas cubiertas que se centren en proteger sus edificios de la corrosión y mejorar las experiencias de los visitantes y el personal.

Comprender los efectos de la humedad

La evaporación de la piscina está provocada principalmente por temperaturas no reguladas en las piscinas cubiertas. Sin embargo, puede aumentarse cuando la piscina está llena y aumenta el área de superficie del agua. A medida que el agua se evapora y aumenta la humedad, el exceso de humedad puede provocar:

• Hongos y moho
  Con más humedad en el aire, es probable que se forme condensación, lo que crea las condiciones perfectas para los hongos y el moho. Si no se trata, esto puede extenderse rápidamente por todo un edificio, corroyendo la estructura y liberando esporas tóxicas en el aire que pueden causar irritación cutánea, dificultades respiratorias y asma.
  
  

• Entorno incómodos
  Las fluctuaciones de temperatura, la falta de aire fresco, la niebla y el fuerte olor a cloro son signos de humedad no regulada. Además de una experiencia incómoda para los visitantes, es probable que el personal que intenta trabajar en estas condiciones tenga dificultades.
  
  

• Corrosión acelerada
  Cuando el cloro se evapora con el agua de la piscina, se capta en la atmósfera y puede penetrar en las paredes de su edificio. Dado que es un producto químico muy agresivo, el cloro comenzará a deteriorar los bloques de cemento, las juntas de mortero, los ladrillos, las puertas metálicas y los accesorios de iluminación a una velocidad mucho más rápida.

¿Por qué se acumula humedad en las piscinas?

Dado que el aire caliente puede contener más humedad que el aire frío, los niveles de humedad aumentarán a medida que se caliente la sala de la piscina. La cantidad de humedad que el aire puede mantener a su temperatura actual se mide en forma de porcentaje de humedad relativa (HR). Cuando el aire se enfría (por la noche o durante horas menos ajetreadas) y es capaz de retener menos humedad, el nivel de HR seguirá aumentando hasta que alcance el 100 % o el «punto de rocío». Esto sucede cuando se libera un exceso de humedad en la atmósfera.

El aire húmedo también se condensará en superficies frías por debajo de la temperatura del punto de rocío. Por ejemplo, cuando el aire del interior de una piscina es de 28 °C con una humedad relativa del 60 % y la temperatura de una ventana es inferior a 19,5 °C.

Las piscinas cubiertas son ecosistemas delicados

La regulación de la humedad requiere una solución de tratamiento del aire personalizada para cada entorno de piscina. Algunos de los factores decisivos son el tamaño de la piscina, el volumen de la piscina cubierta y el número de nadadores que espera que acudan a diario.

Las unidades de tratamiento del aire de Dantherm se pueden adaptar a cualquier piscina cubierta. Desde gimnasios privados hasta centros deportivos con piscinas olímpicas. Cada sistema está diseñado para gestionar el flujo de aire, la temperatura y la humedad con el fin de maximizar la comodidad de sus visitantes, las condiciones de su edificio y el consumo energético de sus instalaciones.

Si desea obtener más información sobre cómo gestionar la humedad en su piscina cubierta o encontrar la solución adecuada para su entorno, no dude en ponerse en contacto con nuestro equipo de expertos.