Cómo las ONG y el ejército mantienen la refrigeración en condiciones extremas

En este artículo, se explica por qué las fluctuaciones de temperatura pueden alterar el éxito de las operaciones de ayuda militar y humanitaria, y cómo la tecnología de refrigeración por aire se puede utilizar para crear entornos de trabajo y vida seguros en algunas de las condiciones más difíciles imaginables.

Los peligros de las temperaturas extremas

Mientras que las tiendas de campaña y las estructuras temporales protegerán a las personas de los elementos hasta cierto punto, en entornos extremos como los desiertos, el calor puede quedar atrapado en su interior. Cuando el calor es muy intenso, la instalación de ventiladores simplemente desplazará el aire caliente alrededor de un espacio y no proporcionará ningún alivio.

La crisis humanitaria en Oriente Medio continúa y los refugios temporales se están convirtiendo en alojamiento a largo plazo para personas que escapan de los conflictos. En algunas de las zonas más afectadas, el cambio climático y las olas de calor del desierto se han relacionado directamente con enfermedades graves, el deterioro de los alimentos y las condiciones de vida insalubres.

Uno de los principales retos para el control climático es que estos entornos suelen tener atmósferas increíblemente secas. Esto significa que las temperaturas pueden cambiar considerablemente entre el día, la noche, el verano y el invierno, ya que los bajos niveles de humedad permiten que el calor se escape más rápidamente del aire. En Siria, por ejemplo, donde aproximadamente 12 millones de personas necesitan asistencia humanitaria, las temperaturas diurnas pueden alcanzar los 45 °C en verano y caer por debajo de cero con nevadas regulares durante el invierno.

Por este motivo, las ONG y el ejército confían en soluciones de control climático aprobadas por la OTAN que puedan transportarse rápidamente a situaciones de emergencia e instalarse con una interrupción mínima. Para que sean adecuadas para su propósito, las unidades de control climático que se introducen en estos entornos deben ser versátiles, portátiles y estar fabricadas para soportar condiciones adversas. Se utilizan habitualmente para regular las temperaturas en:

• Centros de comunicación

• Hospitales de campo

• Campamentos militares

• Campamentos de ayuda humanitaria

• Tiendas de campaña y edificios temporales
  

Por qué las ONG y el ejército confían en Dantherm

Durante los últimos 35 años, se han instalado más de 30 000 unidades portátiles de refrigeración, calefacción y secado de Dantherm en operaciones militares y humanitarias. Fabricadas en nuestras instalaciones de Dinamarca y probados tanto in situ como sobre el terreno, nuestras unidades están aprobadas por la OTAN y construidas para cumplir con los requisitos avanzados de AQAP, así como con las normas ISO 9001 y 14001 (los requisitos internacionales para un sistema de gestión medioambiental eficaz).

Debido a que cada campamento u hospital de campaña tiene sus propios requisitos únicos, trabajamos con proveedores de tiendas de campaña y contenedores para diseñar soluciones personalizadas específicas para cada emplazamiento, diseñadas para:

• Funcionar a temperaturas comprendidas entre –40y +60 °C

• Minimizar los costes logísticos

• Requerir un mantenimiento mínimo

• Integrar sistemas de refrigeración y calefacción

• Maximizar la eficiencia energética
  

Para mantenerse al día con los proyectos militares y humanitarios que se desarrollan en todo el mundo, nuestro equipo de investigación y desarrollo realiza visitas frecuentes a los campamentos y hospitales de campaña que utilizan actualmente la tecnología de Dantherm.

Para hablar sobre sus retos de control climático, obtener más información sobre los sistemas disponibles u obtener asistencia y cursos de formación exhaustivos, no dude en ponerse en contacto con nosotros.