¿Adesorción o condensación? Cómo elegir el deshumidificador adecuado para tus necesidades

La elección que haga dictará la eficiencia y la rentabilidad del mantenimiento de la humedad en su edificio. En este artículo, le explicamos las diferencias entre la deshumidificación por adsorción y la deshumidificación por condensación, las aplicaciones más adecuadas para cada una y por qué Aerial se ha convertido en una fuente de experiencia tan reconocida en toda Europa.

¿Qué es la deshumidificación?

Aunque pueda parecer que volvemos a lo básico, la elección del sistema adecuado se basa en la comprensión de los principios científicos clave que dictan cómo se elimina la humedad del aire.

En el centro está la humedad relativa (HR). Se trata de una unidad (representada en forma de porcentaje) que nos indica la cantidad de vapor de agua contenida en el aire en relación con la cantidad de vapor de agua que el aire puede contener a su temperatura actual.

Es la razón por la que la temperatura es un factor tan definitorio de la eficacia de un deshumidificador y de la rentabilidad de la solución elegida.

Cuando la temperatura desciende, la humedad relativa aumentará, lo que indica que el aire tiene menos capacidad para retener la humedad. Con el tiempo, el ambiente alcanzará el 100% de HR o el "punto de rocío", el estado en el que el aire ya no puede retener el agua y comienza a liberarla en forma de condensación.

En el interior de los edificios, esto es más común cuando el aire caliente y saturado de agua entra en contacto con superficies frías, como accesorios metálicos o ventanas de un solo cristal.

Como regla general, es importante mantener la humedad relativa por debajo del 60%RH para evitar que el óxido, el moho y otros efectos del exceso de humedad causen grandes daños en los edificios. Al mismo tiempo, es importante mantener un nivel de HR entre el 50% y el 60% para mantener unas condiciones saludables y confortables para las personas en el interior de los edificios.

¿Cuál es la diferencia entre la deshumidificación por condensación y por adsorción?

Aunque ambas soluciones eliminan la humedad del aire, los diferentes procesos afectan a su rendimiento de secado y al uso de energía en diferentes entornos.

Secado por condensación
También conocida como deshumidificación por refrigerante, una unidad de condensación atrae el aire cargado de humedad (aire húmedo) hacia un deshumidificador y a través de una bobina refrigerada. El aire se enfría rápidamente por debajo de su punto de rocío, condensando el vapor de agua y recuperando su energía térmica latente para reutilizarla. El aire enfriado pasa a continuación por el condensador, donde se recalienta y se devuelve a la sala como aire caliente con la humedad más baja requerida.

Secado por adsorción
A menudo denominado deshumidificación por desecante, una unidad de secado por adsorción hace pasar el aire a deshumidificar (aire de proceso) por un rotor de gel de sílice que gira lentamente. El material desecante atrae la humedad a su superficie, eliminándola de la corriente de aire (aire seco). Detrás del rotor, el flujo de aire se divide: una parte se descarga como aire seco y la otra se utiliza para regenerar el rotor. Este aire (húmedo) debe ser expulsado a la atmósfera mediante un conducto. La rotación lenta del rotor a través de ambas corrientes de aire crea un proceso de deshumidificación continuo.

¿Cuál es la solución adecuada para usted?

La infografía anterior debería darle una visión clara de las diferencias entre los dos tipos de sistemas. Determinar la unidad más adecuada para su entorno se centra en crear las condiciones más idóneas minimizando los costes. En otras palabras, equilibrar lo que es técnicamente posible con lo que es sostenible.

Esto nos lleva de nuevo a la relación entre la temperatura y la humedad relativa.

A temperaturas más altas, la tecnología de condensación suele ser más eficiente energéticamente. En entornos húmedos como una piscina, por ejemplo, el consumo de energía utilizando una solución de adsorción puede ser de 3 a 4 veces mayor en comparación con una solución de condensación. Eso es mucho dinero desperdiciado y un gran coste para el medio ambiente.

Sin embargo, los deshumidificadores por condensación tienen limitaciones por debajo de 8°C y 40%RH, lo que los hace menos adecuados para entornos más controlados. En los laboratorios, por ejemplo, a menudo se requiere un nivel de HR inferior al 30%, y en las cámaras frigoríficas y almacenes de frío, las temperaturas suelen estar en torno a los -18°C. En ambos casos, una solución de adsorción es mucho más eficiente tanto en términos de coste como de rendimiento.

Por eso siempre empezamos con la temperatura y el nivel de HR requerido. A continuación se muestran algunos ejemplos comunes de cómo la temperatura y la humedad relativa pueden determinar la elección de la tecnología:

Es muy raro que haya una única solución correcta para deshumidificar un ambiente. Como muestra el ejemplo de la fábrica de filetes de pescado anterior, hay aplicaciones que se desvían de la orientación con la temperatura y la HR. Por lo tanto, los ejemplos anteriores no son necesariamente definitivos y se debe consultar a los especialistas en cada caso. Incluso después de haber investigado a fondo, es posible que se encuentre con la posibilidad de elegir entre varias unidades diferentes que, sobre el papel, parecen todas adecuadas. Para seleccionar la mejor, es importante trabajar con un experto para entender las necesidades específicas de su entorno.

Elegir entre desecante y condensado no es el único factor decisivo de su solución. Otras consideraciones importantes son:

• Aire fresco
  Parte de un entorno cuidadosamente controlado incluye la circulación de aire fresco y limpio por todo el edificio.
  
  

• Personas
  Es responsabilidad del propietario de un edificio garantizar un entorno seguro y confortable para el personal, los clientes y los visitantes.
  

• Construcción
  La edad, la ubicación y los materiales de un edificio afectarán a la forma en que reacciona a la temperatura y la humedad. Por ejemplo, los edificios más antiguos con menos aislamiento y poca iluminación natural serán más susceptibles de sufrir moho y humedad debido a las rápidas bajadas de temperatura.
  
  

• Artículos almacenados
  Las instalaciones de almacenamiento pueden utilizarse para albergar productos alimenticios, coches clásicos o archivos delicados, todos ellos muy reactivos a los cambios de temperatura y humedad.
  

• Temporadas del año
  Los niveles de humedad cambian naturalmente con las estaciones. En lugares con climas fluctuantes, su sistema de deshumidificación debe ser eficaz durante todo el año.
  
  

• Valor de la inversión frente a costes de funcionamiento
  Cuando se pueden utilizar ambas tecnologías, el responsable de la toma de decisiones a menudo se siente tentado a elegir la solución con menor inversión. Sin embargo, un análisis del coste del ciclo de vida (LCC) demuestra que para las soluciones con costes operativos significativamente más bajos, una inversión más alta es la opción más económica.

Beneficiarse de la experiencia en ambas soluciones

Debido a que Calorex desarrolla soluciones de condensación y adsorción, nuestro equipo de ventas no tiene ningún incentivo para promover una metodología sobre otra. Esto les sitúa en la mejor posición para trabajar con usted y entender su negocio antes de recomendar la unidad más adecuada.

Con cinco décadas de conocimiento en varios sectores, así como de los beneficios y limitaciones de ambos tipos de solución, podemos ofrecer el mejor sistema en términos de idoneidad, eficiencia energética y rendimiento de secado.

Para obtener más información y descubrir el mejor sistema de condensación o desecación para su edificio, póngase en contacto con nuestro equipo a través del siguiente formulario.